Descripción
La arquitectura del retablo es de estilo barroco clasicista, del siglo XVII (1620-1640). Es obra del maestro arquitecto Juan Bustrin, proveniente de Flandes. La estructura es sencilla, de planta recta: Consta de un cuerpo con tres calles, sobre un pedestal alto y banco, y lo remata el ático.
Retablo iniciado hacia 1620-1630, del que en una primera fase se realiza el relicario, completándose la arquitectura e imaginería hacia 1640. A finales del siglo XVII se policromaría, colocando los lienzos laterales y añadiéndole una caja de retablo de hacia 1.500 reaprovechada.
Todavía en la segunda mitad del XVIII se reharía la policromía añadiendo el frontispicio del ático y el cuerpo bajo y remate del sagrario. Consta que el retablo fue policromado en 1792 por Fernando Antonio de Montagud.
Estado de conservación
Hay que destacar el fuerte ataque de termita y carcoma sufrido hace varios años. Los daños se localizaban, fundamentalmente, en la zona inferior izquierda, en la predela, donde se sitúa el lienzo del martirio de San Lorenzo. Afectaban también al relieve de San Miguel y recorrían la trasera de la 2ª columna.
Además, estaba cubierto por un barniz grueso, hoy en día, color caramelo.
Nuestra intervención
- Se llevaron a cabo importantes labores de consolidación y refuerzos leñosos en las zonas más dañadas, con el fin de devolver a la estructura una consistencia lo suficientemente estable.
- La hornacina donde está situada la imagen de Cristo, estaba cubierta por dos tablas de contrachapado, que retiramos dejando a la vista el paisaje de Jerusalén.
- En cuanto a la policromía se reforzó la adhesión del aparejo y la película pictórica.
- La limpieza se limitó a lo imprescindible. Se eliminó el estrato superficial de barniz oxidado, color caramelo, que cubría toda la obra.
- Las lagunas de mayor tamaño y de la zona más baja, como la predela, fueron previamente aparejadas para su reintegración con la técnica de rigattino, haciendo vibrar los colores mediante el rayado, consiguiendo un efecto cromático que se integra perfectamente y que permite la correcta lectura de la obra.
Estudio de policromías de la imagen de Cristo crucificado
Presentaba una sucesión de diferentes policromías. Se trata de re-policromados completos, que cubren tanto la corona como el cabello, las carnaciones y el perizoma. El último de estos re-policromados es de muy escasa calidad, de aplicación muy tosca y demasiado llamativa.
Apreciamos 5 policromías superpuestas. Una vez concluido el estudio y elaborado el diagnóstico, se tomó la decisión de documentar y retirar las 3 últimas re-policromías, ya que ninguna mostraba ni la calidad suficiente, ni estaba en las condiciones óptimas que merece una obra de esta época. Se tomó la decisión de conservar la 2ª re-policromía, la cual era de calidad, estaba lo suficientemente completa y en un aceptable estado de conservación, aunque mostrara un grueso estrato de suciedad superficial incrustada, que se eliminó, ganando la imagen en calidad, color y luminosidad.